CURD JÜRGENS


Curd Gustav Andreas Gottlieb Franz Jürgens, conocido artísticamente como Curd Jürgens, nació el 13 de diciembre de 1915 en Solin, Munich, Bavaria. Actor alemán que en 1945 tomó la ciudadanía austriaca.



Aunque su formación fue alemana, y por lo tanto europea, también supo adaptarse al cine estadounidense. Su carrera ha sido larguísima, repleta de títulos de toda índole y en colaboración con directores de todas clases. Sus comienzos, sin embargo, tuvieron lugar lejos del mundo del cine y el teatro, en el ámbito del periodismo y la literatura; no obstante, pronto se cansó de esta actividad y se dedicó a estudiar arte dramático. Debutó en el cine en 1935 y lo compaginó con el teatro hasta 1955. Su primera película fue Königswalzer (1935), de Herbert Maisch. Durante la Segunda Guerra Mundial se vio recluido en un campo de concentración por mandato específico del ministro de propaganda del III Reich Joseph Goebbels, bajo la ambigua acusación de ser políticamente indeseable para el Reich alemán.



A partir de los años cincuenta, su distanciamiento del teatro coincidió con una etapa internacional en su trayectoria cinematográfica, que le convirtió en un actor altamente polifacético, tanto en el cine norteamericano como en el europeo. El no haber colaborado con el Reich le ayudó a ser contemplado con simpatía, aunque, paradójicamente, muchos de los papeles que le dieron cierta fama fueron aquellos en los que encarnaba a oficiales alemanes. Poseía una gran distinción y sabía dotar a todos sus personajes de profunda humanidad, lo que contribuyó a hacer más creíbles sus interpretaciones y a despertar la simpatía del público. Con la piel bronceada y el pelo de un gris atrayente, que no llegó a canoso hasta sus últimos años. Jürgens aunaba virilidad y encanto al mismo tiempo; era cordial y señorial a la vez y aparentaba una gran cultura, aunque no hubiese pasado por centros de prestigio internacional.



A mediados de los años cincuenta, cuando su carrera ya era larga, Vadim le ofreció uno de los tres papeles importantes de Y Dios creó a la mujer (1956), junto a Jean Louis Trintignant y Brigitte Bardot. La película era discreta, surgida a la par de la aparición de la Nouvelle Vague de Godard, Truffaut o Chabrol; su éxito se apoyaba en el aura que la Bardot, con su fresca ingenuidad, sabía transmitir al filme, en el cual Jürgens cumplía con su misión de galán maduro y elegante de un modo irreprochable. Ese mismo año tuvo lugar el rodaje de otro de los filmes que le confirieron popularidad: Miguel Strogoff: El correo del zar de Carmine Gallone, y con Dick Powell en la dirección participó en Duelo en el Atlántico (1957), junto a Robert Mitchum, en una de las mejores películas de los años cincuenta sobre la guerra en el mar en la que interpretaba a un capitán de submarino alemán. Mark Robson le dio un papel que él aprovechó en una película hoy olvidada, pero que en su día tuvo mucho éxito: El albergue de la sexta felicidad (1958).



Su carrera continuó con diferentes trabajos: hizo de oficial alemán opuesto a la estrategia de Hitler en El día más largo (1962), con Ken Annakin, Andrew Marton y Bernard Wicki en la dirección; sirvió de soporte a Peter O´Toole en Lord Jim (1964), del siempre interesante Richard Brooks, según la novela del mismo título de Joseph Conrad. Una personalidad tan especial como la del escritor Romain Gary le dirigió en Matar (1971), cuando el escritor francés pasó por una fase de dirigir películas más bien mediocres. Y ese mismo año actuó en el fastuoso espectáculo que fue Nicolás y Alejandra (1971), de Franklin J. Schaffner, y donde la dirección artística del español Gil Parrondo consiguió un Oscar. Con Claude Chabrol apareció en Locuras de un matrimonio burgués (1976), cuando el director francés guardaba ya en el recuerdo la Nouvelle Vague y se dedicaba a la disección de la burguesía francesa.



 

Jürgens también fue director en algunos trabajos como Sin ti todo es tiniebla (1956) o Asalto en la Rue Latour (1961). Tuvo cinco matrimonios; el que más le duró fue con Simone Bicheron (1958-1971); también estuvo casado con la actriz Eva Bartok (1955-1956). Curd Jürgens falleció el 18 de junio de 1982 en Viena (Austria) a la edad de 66 años.




CARTELES de las películas seleccionadas:









Fuente: mcnbiografias.com

Imagen: wissen.de

Carteles películas: imdb.com/amazon.es/todocoleccion.net/filmaffinity.com


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