MICHAEL CAINE

Maurice Joseph Micklewhite, conocido artísticamente como Michael Caine, nació el 14 de marzo de 1933 en el barrio londinense de Bermondsey y en el seno de una familia humilde. Su padre era estibador y su madre empleada de hogar.

Poco aplicado en los estudios, el joven Maurice se enroló en el ejército británico, llegando a luchar en la Guerra de Corea. Cuando terminó el conflicto bélico, trabajó en diferentes oficios mientras asistía a clases de interpretación. Su oportunidad llegó cuando fue contratado como asistente del director en la compañía de teatro Horsham Repertory Company. Por esa época adoptó el nombre de Michael Caine (el apellido artístico deriva de “El motín del Caine”, una de sus películas favoritas). Entre la segunda mitad de la década de los años 50 y la primera de los 60, Caine apareció en un buen número de producciones teatrales y en trabajos para la pequeña pantalla, compartiendo piso con un actor que también comenzaba a probar fortuna en el mundo de la interpretación: Terence Stamp. Su elegante porte y acento cockney pudo ser disfrutado en la gran pantalla durante esa época, aunque con breves papeles en películas como Infierno en Corea (1956) de Julian Amyes, La llave (1958) de Carol Reed, Zafarrancho en la marina (1960) de Robert Asher, o El honrado gremio del robo (1962), comedia dirigida por Cliff Owen y protagonizada por Peter Sellers. En cuanto a su vida sentimental, en esta época Michael ya se había casado y divorciado con la actriz Patricia Haines, a la que conoció en su primera etapa en el teatro. Patricia y Michael estuvieron juntos tres años, desde 1955 hasta 1958.

La pareja tuvo una hija a la que llamaron Dominique (nacida en el año 1956). Su primer papel importante como actor cinematográfico fue Zulú (1964), filme realizado por Cy Endfield que contó con el protagonismo principal de Stanley Baker y Jack Hawkins. Este título fue el preámbulo para el protagonismo en la película que le convirtió en estrella en todo el mundo, Alfie (1966), comedia dramática dirigida por Lewis Gilbert que le llegó a proporcionar una candidatura al premio Oscar gracias a un papel que, curiosamente, había desechado su amigo Terence Stamp con anterioridad. La estatuilla fue para Paul Scofield por su protagonismo en “Un hombre para la eternidad”. Con anterioridad a Alfie, Michael Caine había sido elegido como actor protagonista para encarnar al detective Harry Palmer, un sosias de James Bond que apareció en tres películas: Ipcress (1965) de Sidney J. Furie, Funeral en Berlín (1966) de Guy Hamilton y Un cerebro de un billón de dólares (1967), último título de la serie que dirigió Ken Russell. Otros importantes filmes de finales de los años 60 en los que intervino Caine fueron La caja de las sorpresas (1966) de Bryan Forbes, Ladrona por amor (1966) de Ronald Neame, 7 veces mujer (1967) de Vittorio de Sica, Mercenarios sin gloria (1968) de Andre de Toth o La batalla de Inglaterra (1969) de Guy Hamilton.

En los años 70 el prolífico Michael Caine confirmó su estrellato al protagonizar cintas de muy diversos géneros como El último valle (1970) de James Clavell, Comando en el mar de china (1970) de Robert Aldrich, Asesino implacable (1971) de Mike Hodges, Historias peligrosas (Pulp) (1972) de Mike Hodges, La huella (1972) de Joseph Leo Mankiewicz, Una inglesa romántica (1975) de Joseph Losey, El hombre que pudo reinar (1975) de John Huston, La conspiración (1975) de Ralph Nelson, Ha llegado El Águila (1977) de John Sturges o California Suite (1978) de Herbert Ross. Por su interpretación junto a Laurence Olivier en La huella (1972) fue nominado de nuevo al Oscar, premio que logró Marlon Brando por “El Padrino”. Tras divorciarse de Patricia Haines, Caine se casó por segunda vez en 1973 con la modelo y Miss Guayana, Shakira Baksh (Shakira Caine), a quien podemos ver al lado de su marido en la película El hombre que pudo reinar. Shakira y Michael tuvieron en el año 1973 a su hija Natasha.

La carrera de Michael Caine durante las siguientes décadas continuó a buen ritmo, apareciendo en multitud de producciones, tanto de cine como de televisión, muchas de ellas de escasa valía artística que sólo merecen la pena contemplarse por la presencia del gran actor británico. Las más populares son Vestida para matar (1980) de Brian de Palma, La mano (1981) de Oliver Stone, Evasión o victoria (1981) de John Huston, La trampa de la muerte (1982) de Sidney Lumet, Educando a Rita (1983) de Lewis Gilbert, Lío en Río (1984) de Stanley Donen, Dulce libertad (1986) de Alan Alda, Mona Lisa (1986) de Neil Jordan, Hannah y sus hermanas (1986) de Woody Allen, El cuarto protocolo (1987) de John Mackenzie, Un par de seductores (1988) de Franz Oz, Las normas de la casa de la sidra (1999) de Lasse Hallstrom, Miss Agente Especial (2000) de Donald Petrie o Quills: El poder la provocación (2000) de Philip Kaufman. También apareció en una versión televisiva que recreaba las andanzas del famoso asesino Jack el Destripador.

En el año 1983 fue por tercera vez nominado al Oscar por Educando a Rita . Esta vez el ganador de la estatuilla fue Robert Duvall por su interpretación en “Gracias y favores”. El talento como actor de Michael Caine fue recompensado con dos Oscar. El primero, en la categoría de mejor actor secundario, por Hannah y sus hermanas (1986), compitiendo con Willem Dafoe por “Platoon”, Tom Berenger por “Platoon”, Dennis Hopper por “Hoosiers: Más que ídolos” y Denholm Elliott por “Una habitación con vistas”. En el año 2000 recibió su segundo Oscar como mejor actor secundario por su papel de médico pro-abortista en Las normas de la casa de la sidra (1999). Los otros candidatos eran Tom Cruise por “Magnolia”, Jude Law por “El talento De Mr. Ripley”, Michael Clarke Duncan por “La milla verde” y Haley Joel Osment por “El sexto sentido”.

Para culminar un año espléndido en lo profesional y personal, en octubre de ese mismo año la corona británica le otorgó el título nobiliario de Sir. Algunos de sus últimos estrenos más relevantes son El caballero oscuro (2008), filme de Christopher Nolan con Christian Bale como Batman; Origen (2010), otro filme dirigido por Christopher Nolan; La juventud (2016), película co-protagonizada por Harvey Keitel; o Un golpe con estilo (2017), comedia sobre un robo a un banco que Michael planea junto a Morgan Freeman y Alan Arkin. En el 2018 volvió al robo con Rey de ladrones (2018). Dos años después participó en una breve aparición en Tenet (2020), thriller de ciencia-ficción que le reencontró con Christopher Nolan; y formó parte del reparto de la fantasía Érase una vez… (Come Away) (2020).

CARTELES de las películas mencionadas: